29 de junio de 2014

Tino Tovar, el autor tocado por un ángel.

Presentación La canción de Cádiz

Año 1.997. Concretamente el 31 de octubre de uno de esos días que no te puedes creer la caló que hace todavía. A eso de las 8 de la tarde llegaba Tino Tovar a la Caleta, libreta en mano. Se le veía fatigado y preocupado. Necesitaba una letra para su comparsa y no tenía ná. Llevaban un mes con el pasodoble de medía y un principio de presentación que no terminaba de cuajar. Como último recurso, probó a ir al mercado, a ver si algún cochino disfrazado de político le sugería algún verso, pero fue una pérdida de tiempo. Lo único que logró apuntar en su libreta, con doble subrayado fue: "El día de los Tosantos". Y con eso, desesperado, se fue a la Caleta. No creía en supersticiones, pero si tanto poeta se reunía allí con las musas, a lo mejor él también tendría esa suerte. Se dio un paseo por la orilla, mirando las barquillas y las gaviotas, la mar quieta, el Sol derramándose en el agua, una parejita fumando en las columnas del balneario, un viejecito haciendo footing, dos chavales con un cubo de cangrejos y una guitarra. "Estos son viñeros", se dijo. Pero nada le daba un verso. Siguió recorriendo la playa hasta que se chocó con el camino que lleva al Castillo de San Sebastián. Miró hasta el final del puente y tragó saliva. Echó un vistazo a su alrededor y solo encontró a un señor disfrutando de las vistas pegado a la muralla derecha del camino. Al menos no habría mucha gente presenciando el ridículo si no lo conseguía.

27 de junio de 2014

Pepito Martínez, un músico diferente

Pasodoble Áfrika

José Martínez González. Pepito Martínez o Pepito "el Guitarra", que en Cádiz todo el que es digno de conocerse tiene un mote. Es el nombre de uno de los músicos más punteros de nuestro Carnaval aunque lamentablemente a estas alturas sigue siendo un desconocido para gran parte del público. Esto es seguramente por haber elegido una forma de hacer Carnaval en segundo plano, haciendo músicas geniales y afinando grupos de primerísimo nivel sin decir nunca esta Comparsa es MÍA. Fue el músico de Quiñones durante más de 15 años y siempre se le ha llamado la Comparsa de Quiñones. Estos años atrás le ha pasado un poco lo mismo con la comparsa de los Majaras, un grupo con entidad propia donde los autores nunca van a destacar, aunque parece que eso empieza a cambiar. Pero siempre le persigue ese segundo plano, como si las músicas de Pepito sólo fueran una herramienta más, como si el verdadero genio de esas comparsas estuviera sólo en las letras o en las voces. Una comparsa nunca puede ser mejor que su pasodoble

Dentro de la guitarra de Pepito hay un duende viviendo que es capaz de parir pasodobles como si todos los años fuera un nuevo Carnaval. Es decir, como debería ser, pero que en realidad sólo es así en casos excepcionales: Pepito, Juanma, Bustelo, Antonio cuando salía, en ocasiones Tino, en ocasiones Jesús... no hay muchos más que sean capaces de conseguir que la música del pasodoble sea un mensaje en sí misma y no sólo una herramienta al servicio de la letra. Pepito lo consigue año tras año y aún así no termina de abandonar esa barrera del anonimato para el gran público. 

Pero todo lo que yo pueda decir sobre este autor se queda en nada en comparación con lo que dice cualquiera de sus músicas, y no hay mejor muestra que un botón, así que ahí va un botón de cada uno de sus pasodobles (al menos los que he encontrado), para disfrute y conocimiento de todos. Pepito es diferente.

26 de junio de 2014

Cancionero: Pasodoble Los destripadores de la calle Londres

Pasodoble Los destripadores de la calle Londres

Qué bonito pasodoble traía Manolito Santander este año. Aunque sabemos que no es suyo, sino del otro viñero por excelencia, Antonio Martín. De hecho, los primeros sones recuerdan a los pasodobles ochenteros de las míticas comparsas de Martín. La primera parte por acordes menores no para de iluminar en mi cabeza versos del pasodoble de A fuego vivo, pero cantando a su modo. Los acordes de un pasodoble son sus rasgos faciales y en este se nota que es clavaíto a su padre. Tiene esa sencillez, esos cambios justos y necesarios para crear el cuerpo. A cada verso le corresponde un acorde, o menos. Porque cada verso necesita su sitio y su tiempo y la melodía no puede distraer del mensaje. La sencillez es fácil de apreciar pero difícil de explicar y todo lo que digamos de ella es más de lo que se necesita para entenderla

Pero es un pasodoble con dos padres, y aunque ya sabemos que tiene toda la cara de uno de ellos, también hay que decir que suena igual que su otro padre, Manolito. Uno pone la sencillez, pero el otro le pone la garra y la gracia, y yo creo que esa es la Santísima Trinidad Viñera. Qué bien le ha venido a Manolito el descanso y qué bien se ha armado para volver, formando un grupo perfectamente equilibrado entre la experiencia y la sangre nueva. Mantiene pilares fundamentales de sus chirigotas de siempre que hacen que el grupo suene como el de los Pepperoni, pero le añade las ganas y el hambre de unos chavales buenísimos que seguramente el año de los Pepperoni desayunaban pan con chocolate en el recreo. Chavales que ocupan puestos de máxima importancia en la chirigota como es la instrumentación, la base donde se asienta un grupo, o en la primera fila repartiendo desparpajo. Serán buenos destripando el pescao, pero son mejores vendiéndolo. Eso demuestra que con este grupo a Manolito todavía le quedan chirigotas pa hacer una cabalgata él solo, y así da gusto escucharlo.

25 de junio de 2014

Cancionero: Pasodoble La comparsa perfecta

Pasodoble La comparsa perfecta

Retomamos la actividad en el blog, aunque de poquito a poco. Todavía hay que terminar de subir los acordes de 2.014 antes de que empiecen a filtrarse los primeros de 2.015... ¡¡y todavía me quedan la mitad de los pasodobles!! para que os hagáis una idea, todavía tienen que pasar por aquí los pasodobles de Vamos tirando, Áfrika, La mecha, Las brujas, Los cuenterete, Los Amancio Hortera, Los chicos del tejado, Los shunguitos, Los Quintero, OBDC, La tómbola, Óyeme, Los destripadores de la calle Londres... no sé si me dejaré a alguien fuera. Si falta alguno de los indispensables de este año, por favor, no dudéis en recordármelo a través de los comentarios o por Twitter. Después de los pasodobles nos meteremos con las presentaciones, sobre todo las de comparsa, como siempre. Y cuando acabe esa odisea seleccionaremos algún popurrí que sea completo musicalmente, ya tengo pensados 2 ó 3. Esperemos que todo eso llegue antes de enero... para que nos de tiempo a retomar otras secciones del blog como el Carnaval + Ultra o los pasodobles de Paco Alba.

Para el regreso he elegido el pasodoble de La comparsa perfecta en primer lugar porque hay un orden y me gusta seguirlo. Y en segundo lugar porque estos acordes están revisados y corregidos por @alemejias26, que además de amigo y seguidor del blog, es guitarra de la comparsa de Juan Fernández y ha tenido la amabilidad de dedicar un poco de su tiempo a que podamos contar con la mejor versión posible de los acordes de su comparsa. Desde aquí agradezco tu interés y tu ayuda Ale, aunque te recuerdo que todavía tienes pendiente conmigo que nos cuentes cómo es el día a día en la comparsa de Juan Fernández, y tienes este blog a tu disposición para cuando quieras hacerlo. Sobre la comparsa, ya me meteré a analizarla en profundidad cuando suba los acordes de la presentación, hoy lo que importa es que vuelven los acordes, yo sé que los análisis os interesan menos, así que a disfrutar y a practicar para que también disfruten nuestros vecinos.